Los CONTRATOS DEL ALMA son aquellos CONTRATOS que establece nuestra alma con otras almas para vivir experiencias y aprendizajes que necesita integrar en esta vida, en esta dimensión, y así poder volver a la fuente infinita, a la casa del Creador.
Al sentirse separada de la fuente, cada alma elige antes de nacer las experiencias que desea aprender en esta vida para poder volver a su origen, por ello crea contratos con otras almas que la ayudarán a comprender y liberarse del ciclo kármico. Aquí quiero aclarar que el KARMA no significa castigo, significa “acción”, y hace referencia a la Ley de Causa y Efecto. Todo lo que haces genera un efecto, una consecuencia, y si esa consecuencia es dolorosa, hay que sanar la causa que la creó.
Estos contratos entre almas o pactos álmicos poseen diferentes niveles, como son los contratos con la familia directa (padres, hijos, hermanos), la familia política (pareja, suegros), los amigos cercanos o los conocidos. También poseen diferentes intensidades, como son los contratos desde el amor y los contratos desde el dolor. No significa que existan contratos o pactos álmicos positivos o negativos, se refieren a los aprendizajes que provienen de experiencias alegres y otros aprendizajes que llegan de experiencias dolorosas. ¿Puedes recordar alguna experiencia dolorosa en tu vida y reflexionar qué aprendiste de ella? En el preciso instante que logras aprender la lección, estas rompiendo con estos contratos álmicos.
¿Para qué nuestra alma elige estos contratos? Existen muchas respuestas, pero digamos que todas coinciden en que es para volver a la Fuente Infinita de la cual se separó, pero el problema es que no lo recordamos. Te recomiendo ver la película “Nosso Lar” de Xico Javier para comprender mejor cómo se crean estos contratos. En esta película muestran una dimensión parecida a la tierra donde las almas esperan antes de encarnar, conversan con otras almas para elegir las experiencias que van a compartir mutuamente, ya sea desde el amor o desde el dolor. Al momento de encarnar lo habrán de olvidar, con el propósito de rendir al ego, es lo que muchas doctrinas secretas denominan como “el velo del olvido”.
En su camino por la vida, cada alma irá recordando sus propósitos y asumirá la responsabilidad de tomar consciencia de su evolución propia. Evolucionar a nivel del alma es integrar todas las lecciones que se suman en tu camino, las agradables y desagradables, recuerda que somos todo. El resultado siempre te lleva a la paz y el amor. Dentro de esta experiencia llamada vida vamos a pasar por 2 roles, de víctimas a responsables o creadores. La víctima siente que el mundo está en su contra, que sus malas experiencias son un castigo y que “el otro” siempre es el culpable. Pero la víctima toma consciencia de que es creador de su realidad y decide liberarse de todas las ataduras que no le dejan SER, decide hacerse responsable de su vida, elige aprender de sus experiencias, incluso de sus propios errores, y deja de castigar y castigarse, porque ha comprendido que todo tiene un propósito y baila al ritmo del universo. Desde la física cuántica se demuestra cómo cada partícula del universo está conectada entre sí, cada parte de la creación sigue un patrón numérico y geométrico donde todo está conectado y absolutamente nada sucede al azar. A estas coincidencias pronto las llamaron sincronías.
Cada alma es tu Maestro y cada persona es tu reflejo, cada contrato te permite volver a tu esencia más pura donde nada es bueno o malo, todo es. Una vez participé de una conferencia sobre CONTRATOS DEL ALMA, de pronto una muchacha se levantó enfurecida para opinar y confesó que había sido abusada por un familiar, le parecía cruel creer que su alma “había elegido esa experiencia” para aprender y evolucionar. Todos nos quedamos intrigados. La oradora la miró un momento y respondió “¿ cuántas veces has intentado perdonar a tu agresor?”, le respondió con otra pregunta. La muchacha bajó el tono de su voz y dijo “no lo intenté, cómo podría perdonarlo?”. La oradora se acercó a la muchacha y le volvió a decir “no podemos saber lo que tu alma eligió o por qué lo hizo, pero hoy tienes la opción de aprender a perdonarlo para liberarte del odio que cargas, hazlo por tí y por todas aquellas personas que fueron abusadas y no saben cómo perdonar”. En otra conferencia escuché a una psiquiatra contar su experiencia trabajando con adolescentes que habían sufrido abuso sexual. Una de sus pacientes le había confesado que sólo el perdón y trabajar en sí misma le había ayudado a superar el trauma y perdonar a sus agresores.
Los pactos de dolor serían los contratos que establece nuestra alma con otras almas para aprender desde el dolor, son las lecciones más difíciles pero más poderosas. Todos hemos pasado por el lugar de víctimas y victimarios…no conozco a nadie que no haya experimentado estos roles. Pero llega el momento donde debes reflexionar sobre los conflictos que estás viviendo y en lugar de preguntarte “¿por qué a mí?” puedes empezar a preguntarte “¿para qué me está pasando esto?”, “¿qué puedo aprender de esta experiencia?”. Cada vez que aprendes la lección, liberas el contrato para siempre, eres libre.
Si aún te cuesta comprender una situación, puedes perdonar en tí la parte que está creando esa situación dolorosa y disculparte por creer que el otro es incorrecto. Recuerda que ya eres amor y no hay nada incorrecto en tí.
Otra forma de liberarte del dolor es la derivación divina, que consiste en entregar tus proyecciones a Dios, al universo, al Espíritu Santo o a lo que creas.
Cada contrato entre almas busca otorgarnos experiencias y aprendizajes que necesitamos para volver a nuestro origen más puro, la mala noticia es que olvidamos todo esto al momento de nacer; la buena noticia es que siempre venimos cargados de las herramientas que nos ayudarán a superar esas experiencias de dolor. Conocí el caso de un ex-alcohólico. Al inicio fue difícil para él comprender que su alma había elegido la experiencia del alcoholismo, su padre y su abuelo también lo habían sufrido. A pesar de su condición, era muy disciplinado y entusiasta, amaba su trabajo como entrenador de gimnasio. Cuando logró superar el tema de su adicción completamente, se le ocurrió crear programas de entrenamiento con sus compañeros de alcohólicos anónimos. Al haber sufrido en carne propia los problemas del alcoholismo y luego de haber tenido la fortaleza de superarlo, tenía más experiencia para ayudar a otros a superar el mismo problema. Recuerdo una frase suya “ahora entiendo que debía pasar por ese camino para liberar a mi padre y a mi abuelo, hoy confío en mí más que nunca y puedo ayudar a otros como yo, a pesar de todo he sentido como me han ayudado desde el cielo, es como si otra fuerza divina me hubiera cuidado mientras recuperaba mi confianza y salía de mi adicción”.
Son muchos pactos que nuestra alma realiza con otras almas, algunas experiencias vendrán desde la paz y otras vendrán desde el dolor, ambas experiencias serán necesarias en nuestro camino, la mejor forma de romper un contrato y liberarse del ciclo kármico, es pues, aprendiendo la lección para que esta no vuelva a repetirse. Cuando tomas consciencia de la lección que debías aprender, comprendes que no hay nada incorrecto en tí, eres libre en este preciso instante. Si logras recordar quién eres, ya no necesitarás crear más contratos. Todos volvemos, tarde o temprano, a la fuente primordial de sabiduría infinita. Solo por hoy, intenta ver tu vida con nuevos ojos y buscar en tus experiencias qué puedes aprender o qué te están enseñando.